Paraguay. Febrero 2012

ASUNCIÓN

“Tras perder a mi compañero de viaje (por 24 horas) y pedir un whisky en el avión, llego a una ciudad que me espera con 36° a la sombra y una humedad sacada del metro de Santiago a hora punta durante diciembre”    

A solo dos horas de Santiago en avión, se llega al Aeropuerto Internacional Silvio Pettirossi y tras pagar 12 mil pesos (tarifa estándar) uno llega en taxi a Nuestra Señora Santa María de la Asunción. En el camino se puede ver el edificio de la Conmebol.  

Al llegar uno puede ver que Asunción no es la típica ciudad turística. Mosquitos, hormigas gigantes y murciélagos nos acompañaron todo el viaje. Además ver policía con armamento pesado es algo que acá en Chile no suele solía pasar mucho y a su vez explica por qué todas las calles tienen nombre de militares, mariscales, capitanes y generales. A pesar de todo lo anterior, Asunción tiene su encanto.  

Primero es ridículamente barata: en el momento en que viajé a Paraguay el cambio de dinero entre pesos chilenos y guaraníes paraguayos era 10:1, por lo que las cantidades gastadas suenan caras, pero son muy baratas. Por ejemplo, una hamburguesa con huevo, tomate, lechuga salen 10.000 guaraníes lo que es … ¡luca! o un lomito árabe cuesta 15.000 guaraníes.

Otra cosa son las construcciones, las casas son gigantes, parecen palacios narcotraficantes con sus patios gigantes con árboles inmensos. El Centro Cultural de la República en Asunción, está emplazado en el edificio del antiguo Cabildo y detrás, en las pocas cuadras que hay entre este lugar y el río, solo hay mediaguas. Es como si en Santiago desde La Moneda hasta al Mapocho las hubieran.

Una sorpresa agradable es que los cafés literarios prestan libros, de manera que uno puede tomarse un café mientras lee un libro gratis, si le gusta también uno lo puede comprar.

Atractivos Turísticos:
Cabildo.
El Museo del Barro (que estaba cerrado cuando fui).
La Casa de la Independencia.  

Notas: Yo me quedé en el asunción Hostel, que tiene un buen sistema de aire acondicionado, por lo que el calor no fue tan terrible durante la noche. Las micros pasan solo hasta las 10 pm (eso lo aprendimos a la mala y terminamos caminando caleta) y la gente va a carretear terriblemente bien vestida, a diferencia de nosotros que andábamos con pantalones cortos. Es importante probar la Sopa paraguaya, que no es una sopa, sino un bizcocho esponjoso salado parecido a un pastel de choclo. Nosotros comimos la sopa cerca de la terminal de Asunción, tomando cerveza Victoria, la que se decía ser la menos internacional del país (sic). Finalmente, es súper importante usar repelente de mosquitos, mi compadre Lucho quedó todo enronchado con tanta picadura.

ENCARNACIÓN  

La distancia en linea recta entre Asunción y Encarnación es de 290 km, pero la distancia en ruta es de 365 kilómetros. Nos demoramos como 6 horas en dicho viaje, nos costó 75.000 guaraníes y lo hicimos de noche. Tras tomar desayuno, cruzamos a Posadas, Argentina, rumbo a las ruinas Jesuitas y las Cataratas de Iguazú.

CIUDAD DEL ESTE

Tras un paso por Argentina y Brasil entramos a Ciudad del Este. Ciudad del Este es, junto con Puerto Iguazú y Foz de Iguazú, las ciudades que demarcan el hito tripartito entre Paraguay Brasil y Argentina, donde el río Iguazú desemboca en el Paraná. Cruzamos dos puentes: el primero es el Puente Internacional Tancredo Neves (Entre Argentina y Brasil) y el segundo es el Puente Internacional de la Amistad (Entre Brasil y Paraguay).

La mayor gracia de Ciudad del Este es ser considerada Zona Franca, pero a decir verdad hay cosas más baratas en Patronato (o Tacna). El shopping del Este es un mall no muy grande, donde hay wifi gratis (quizás en 1985 el wifi se encuentra en las farmacias, pero cuando escribi esto no había en ningún lado).  Como recomendación: siempre se debe regatear.

El paso entre Brasil y Paraguay es tan libre que ni siquiera tuvimos que hacer los papeles migratorios para volver a entrar a Paraguay.

Atractivos Turísticos
Turismo de compras.

Si bien no están en Ciudad del Este, Las cataratas de Iguazú, que están como a 20 kilómetros y la represa de Itaipú, una de las mayores centrales hidroeléctricas del mundo también está cerca.

Nuestro viaje continúa hacia Brasil y sus playas.